Ensayo.- No preservemos las lenguas, sino los sentimientos sublimes y los pensamientos refinados que han elaborado los indígenas en su relación con el bosque y el río. Las lenguas indígenas no estarán aquí como las conocemos hoy. Talvez supervivan en los textos, pero no en el hablar cotidiano. Nuestras políticas de preservación de las lenguas indígenas están equivocadas, porque preservan reglas y sonidos que pronto serán vetustos. El pensamiento y las emociones indígenas tomarán su propio camino, sea en sus propias lenguas o mimetizadas en otras. PERSPECTIVA Ninguna de las lenguas indígenas que conocemos hoy fue la misma hace 500 años. Todas las lenguas indígenas que conocemos hoy cambiarán de acá 100 años. Las lenguas indígenas solo quedarán en el papel, porque en el habla común se habrán estirado al límite de la imaginación. El año internacional de las lenguas indígenas fue consignado para reconocer la pérdida, no para convertirse en un hito de continuidad. EL NUMEN DE LAS LENGUAS