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Mostrando las entradas con la etiqueta entierro

¡Talita cum! (La fe de un matsigenka)

“Y tomando a la niña por la mano, le dijo: Talita cum (que traducido significa: Niña, a ti te digo, ¡levántate!)” . Marcos 5:41 A continuación, relataré un episodio de la vida de un padre matsigenka que es creyente evangélico, a quien llamaré Diosconnosotros. Él vive actualmente en una comunidad nativa del Bajo Urubamba, en un afluente del río Picha.  Diosconnosotros, está “casado” o convive con Ladelamiradasilenciosa, una mujer ashaninka, sin duda. Dice él que ella no habla castellano, pero entiende, lo cual he comprobado. Se puede tener una conversación elemental, agregando algunas señas, pero, la comunicación es más efectiva con la mirada. Ella tiene la mirada transparente, acogedora, lírica. Se la puede ver interiormente, y ella a ti, fácil. Diosconnosotros, en cambio, tiene la mirada desconfiada. Parece un matsigenka recorrido que ha visto todas las pendejadas que el “chori”, el extranjero, puede hacer con su palabra y su letra. Así que, desconfía. Bueno, más bien diría que ti...

Un entierro pobre

Hoy tuve la oportunidad de presenciar cómo es enterrada la gente pobre. Con pobre, me refiero a sin dinero y sin familiares que brinden respaldo. No es un caso extremo, es, digamos, un caso “normal”. Para tener una idea, el caso extremo sucede cuando la persona que fallece es abandonada en la morgue del hospital público. Sin más que hacer, la oficina de Asistencia Social solicita a la Beneficencia Pública una fosa común en algún cementerio para enterrar al occiso u occisa. Finito. Para contrastar, un entierro de personas pudientes, es decir, con el dinero, el respaldo familiar y las influencias sociales suficientes, tiene servicio funerario (embalsamiento, maquillaje, cajón barroco, arreglos florales, velas, escolta, etc.), velorio (bocaditos, despedida, misa, etc.), procesión (de carros, de gente, de músicos, de plañideras, etc.) y entierro en una cripta especialmente acondicionada. Vamos a nuestro caso. La persona, una mujer de cuarenta y algo años, murió de una enfermedad crónica en...