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Mostrando las entradas de 2012

Ayahuasca y ayahuasqueros. Escuelas y tendencias de una práctica milenaria en los Andes y la Amazonía sur peruana

En la tradición religiosa prehispánica de los pueblos andinos y amazónicos del suroriente peruano, se conoce como Ayahuasca al brebaje que resulta de la cocción de dos plantas esenciales, la liana del mismo nombre (Banisteriopsis caapi) y el arbusto denominado “chacruna” (Psychotria viridis).[1] En casi 12 mil años de historia el uso de este brebaje se desarrolló en contextos exclusivamente indígenas y bajo dinámicas internas, sin embargo, desde la intervención de los europeos en América y el avance de la modernidad, los conocimientos teológicos y las prácticas rituales en torno a la Ayahuasca están cambiando. En lo que va de este ensayo intentaré caracterizar a las escuelas ayahuasqueras contemporáneas y delimitar sus tendencias bajo el contexto actual. Escuelas ayahuasqueras tradicionales, puntos comunes en 11 mil años de práctica ancestral. Podríamos considerar a los períodos prehispánico, colonial y principios del republicano como las épocas en donde se desarrolló la práctica tradi

"Wanamey, el árbol de la vida". Relato de origen de los Wachiperi

Versión de Alejandro (Darikiking) Jahuanchi. Desde su origen, los pueblos indígenas, como los Wachiperi, Toyeri, Sapiteri y Arakmbut del Cusco y Madre de Dios, son todos hijos de la noche e hijos del día. Cuando después de la oscuridad se hizo la luz y el Ojo Universal (El Sol) iluminó la tierra, apareció la humanidad y con ella aparecieron los animales antiguos como el jaguar, la serpiente, el oso, el mono. Las aves aparecieron después y son fruto del árbol de Wanamey, y son la procreación de Wanamey. Durante muchos, muchos años vivieron inocentes, no conocían el pecado ni el mal, ni había diferencias de ideas políticas, ni guerras, todos vivían en armonía y en paz. Los animales y los hombres vivían  juntos sin miedo los unos de los otros, todo era armonía, convivían juntos, pero cuando el hombre comienza a desarrollarse culturalmente empieza el desequilibrio, las guerras y el desorden, los abusos y los asesinatos, los hombres y los animales dejan de convivir y comienzan a matarse ent

Guerreros en lucha

En esta mañana sin reposo iniciamos la lucha, aunque advertimos que no usurparemos la dignidad de nadie ni esconderemos la piedra, no daremos discursos grotescos ni sembraremos odio en los corazones desorientados, no vestiremos de verde ni obligaremos a los niños a cargar nuestras armas, no tomaremos embajadas ni nacionalizaremos la vida, tampoco ejerceremos liderazgo político ni hurgaremos en la maquinaria mediática, sino que con las justas, armados con el pensamiento reflexivo y la palabra firme, susurraremos en los corazones de quienes quieran escuchar.

Madre Tierra

¿Cuándo nos separamos de lo que siempre fuimos? ¿Cuándo nos deshicimos de la inocencia y por qué? ¿En qué momento interrumpimos la conexión con todo? ¿Cuándo dejamos de sentir la sabia del Universo en nuestro cuerpo? ¿Cuándo abandonamos el diálogo con lo Supremo? ¿Cuándo fue que desobedecimos con alevosía a nuestros creadores? ¿En qué momento desperdiciamos la oportunidad de la Conciencia Superior? ¿Cuándo el agua se convirtió en sangre, el fuego en furia, la tierra en lodo y el viento en lamento? Con todo eso, sin fecha ni tiempo, sin culpa ni ayni, sin decir gracias ni dar plegarias, pero con la panza llena y el rostro satisfecho, seguimos chupando la teta de la Madre Tierra.

Esencias

No represento país, nación, lugar, etnia, color, género ni apellido, soy lo que soy sin etiquetas ni valores, sin nombre ni raza ni pueblo ni sangre ni ejército, soy simplemente hijo del Universo y padre de mi propio cuerpo-Universo, con forma y fondo, con esencia y presencia. Me siento unido a los demás por algo que anda y determina, que es tan común como la respiración y la conciencia, porque todos somos uno y al mismo tiempo esencia.

Comunidades Nativas y territorios ancestrales. (Corregido y aumentado)

Por: Joel Jahuanchi Marca. Los pueblos indígenas siempre serán un tema de reflexión.  De ser considerados como “chunchos salvajes” y de “no querer ser civilizados por la palabra de Dios”, pasaron a ser etiquetados como “sagaces etnobotánicos” y “poseedores  de culturas ancestrales” que deben ser conservadas para los ojos del hombre occidental, como si fuesen piezas de museo. Los pueblos indígenas son herederos de una cultura dinámica y sus territorios ancestrales están llenos de historia y tradición. Antiguamente los Wachiperi vivían en diferentes asentamientos distribuidos por toda la cuenca del río Kosñipata y de los ríos Piñi Piñi, Tono, Pillcopata y afluentes, como el río Hospital, el que lleva este nombre porque allí murieron muchos Wachiperi por causa de la viruela. También había indígenas Wachiperi en el sector denominado Guadalupe, en el Parque Nacional del Manu. Recién a finales de la década del 70 del siglo pasado se constituye la Comunidad Nativa de Queros, conformada por Wa

Matanza

Mientras perros amaestrados matan inocentes, mientras sicarios adolescentes disimulan la evidencia, mientras la hija pone en venta la vida de su madre, mientras la novia esconde el mortal empujón que dio en la montaña, mientras el odio manipula el óxido afilado, mientras la mente inestable planifica la muerte ajena, mientras el deseo sanguinario se disfraza de culpa, mientras encarcelamos a otros para no flagelarnos, mientras fundamentalistas siembran bombas en el alma, y mientras que Israel bombardea Gaza una vez más,  solo quiero decir que ya basta de matar a otros para solucionar los problemas de uno mismo.

Juguetes de navidad

Surgió esa pregunta como si se iniciara una de esas grandes discusiones filosóficas: "¿Papis, por qué esa niña tiene tantos juguetes y nosotras no?". Más que pregunta, era una carencia insustancial mal disfrazada de reclamo. Y ahora que la Navidad toca los bolsillos, la respuesta, mejor dicho la incrédula justificación hecha respuesta, no tiene cómo salir.  Mala es la suerte de aquellos padres que con todo el amor tienen poco dinero para satisfacer la demanda. Pero el viento susurra y la providencia sobrecoge, así que hijas mías escuchen esto: “Una niña no es feliz por la cantidad de juguetes que tiene, sino por la cantidad de sentimientos que comparte con las personas que ama”.  Como dije, parecía una de esas grandes discusiones filosóficas, pero el rostro ceñido de las niñas no quería chamullo. Así que mi esposa y yo, claro está, terminaremos comprando los juguetes, los baratos, y luego compartiremos la sonrisa de las niñas, porque amor les sobra a ellas aunque no tengan ni

Estado mental

Auscultado en mil pedazos luego de una ardua batalla conmigo mismo, en donde no hay victorias ni derrotas, solo enseñanzas y decisiones, las palabras finales calan en el abrevadero de las pasiones y en las posturas fanfarronas: Hay tres comportamientos que me acosan, Señor. Mi irresponsabilidad cuando asumo compromisos, mi deber distraído cuando debo hacer lo que tengo que hacer y la inseguridad con que me disfrazo al momento de decidir. Tres formas de lo que soy, tres formas que ahora entiendo, Señor. He aprendido que estar malhumorado o triste por estas formas no es una consecuencia de lo que hago, de lo que pasa a mi alrededor o de lo que hacen los demás, es una consecuencia de mis interpretaciones. Felicidad o tristeza son estados mentales que dependen en gran parte de cómo interpreto las cosas y cómo me interpreto a mí mismo, Señor. He decidido -mientras el peso de la vacuidad decanta en mi espíritu- configurar mi estado mental en luz y alegría permanente, Señor.

El jardinero

Tenía el suelo fértil, el agua pura, el sol radiante y todos los susurros permitidos para su edad, pero aún así no sonreía, ni siquiera coqueteaba, mas con desdén se inclinaba ante la vida. Los demás árboles relucían con su aroma y hacían el amor en toda forma y color. El jardinero sabía porqué. Lo había intentado todo, romper el cáliz, endulzar los pistilos, calentar los estambres y cultivar los óvulos, pero nada, el viejo árbol se veía cansado, desanimado, esperando el desentierro con las raíces aflojadas. Entonces el jardinero soltó lo imposible, eso que no está permitido, que no viene con uno, pero que sin embargo sale estrepitoso cuando el amor frustrado rebalsa, esa parte del alma que traspasa el propio cuerpo, ese estruendo que nace en la garganta del amante, ese impulso que adormece la soledad y el silencio, esa palabra montada en primitiva sinfonía, esa oración que funge de melodía. Desde entonces y todos los días, como preámbulo del amanecer, el jardinero, apostado en las cop

Comunidades Nativas y territorios ancestrales

Por: Joel Jahuanchi M. Los pueblos indígenas fueron, son y serán tema de reflexión. Considero que los pueblos indígenas no son dueños, sino herederos de una cultura que cambia constantemente y cuyos territorios ancestrales están llenos de historia y tradición. Es el caso de los Wachiperi de la Comunidad Nativa de Queros, que se encuentran en la selva de Kosñipata, provincia de Paucartambo, y por favor no confundir con la nación Q'ero, que se encuentra formado por varias comunidades de habla quechua ubicadas en la zona alto andina de la provincia de Paucartambo. Hago esta aclaración ya que muchas personas confunden y piensan que la comunidad nativa de Queros pertenece a la misma etnia; idiomática y culturalmente son diferentes y lo único que comparten es la cuenca del río Queros, antiguamente conocida con el nombre de San Juan por los primeros misioneros católicos y Eori por los Harakbut.  Hasta los años 60 no existía la comunidad Nativa de Queros. Los Wachiperi que formaron Quero

Sagradas maldiciones

Vino en nombre de Dios, con una mano en el pecho y la otra en la Biblia, traía la verdad desnuda con estampitas de Jesús y María. Tenía la voz reveladora y la soberbia en aumento mientras cerraba los ojos para clamar por el Advenimiento. Desenterró muertos, desnudó dignidades, maldijo pecadores, mandó a la hoguera a los corruptos, mutiló a los desmadrados, escupió a los desagradecidos, lanzó maldiciones a los coludidos y en llanto vociferó sus desgracias, que no eran otras que las obras de sus hermanos.  Así apareció en mi puerta esta mujer cuasimodo, con la voz tan alta y firme, solo para contarme sus planes y desgracias. Así pasaron sapos, culebras, rayos y centellas por sobre mí. Un ras incómodo, una carga pesada y la médula espinal partida. Luego de un rato pensé: Dios se manifiesta de tantas formas solo para enseñarnos… Cerrada la puerta y espantado el susto, pruebas de Fe y lecciones de amor son lo que quedan.

Los extinguidores de la cultura Wachiperi

Hace más de 10 años que conozco a los habitantes de la comunidad nativa de Queros, y recientemente a los de Santa Rosa de Huacaria, en el distrito de Kosñipata, provincia de Paucartambo, Cusco. Ambos comparten un hilo cultural que se está debilitando paulatinamente hasta quebrarse si antes no ponemos los puntos en claro. En estas comunidades viven los indígenas amazónicos autodenominados Wachiperi, antes conocidos como Huachiperis, que son una rama dialectal del pueblo Harakbut. Los antropólogos y otros especialistas de la cultura han determinado que los Wachiperi están volteando la indeseable curva de la extinción cultural. La población quechua y mestiza local, y en general la opinión pública, también advierten sobre la "pérdida de la identidad indígena”, incluso, dada la situación, los niegan como indígenas. Así pues, es consenso entre los extraños que los Wachiperi están en extinción. Por momentos este discurso científico y popular alcanzó las mentes de los Wachiperi, quienes,

Oración del ayahuasquero

Madresita linda, Doctorita atenta, Maestrita lúcida, ante ti me presento con el corazón abierto, cabizbajo, preparado para tus consejos y sabidurías. Te pido permiso para ejercer mi propósito con el resplandor y la sencillez que produce una flor en la montaña gris, sin dejar de reconocer los principios de funcionamiento del Universo, de tu Universo, y consciente de que no es un camino fácil ni satisfactorio, sino una cuenta que he de pagar con diligencia y sin quejas. Así me presento ante ti, te ofrezco lo que soy para que me transformes, amamantes, cures y guíes. Así es Viejita Sabia, aquí estoy y te presento también a quienes desean aprender de ti; dales no lo que buscan sino lo que Tú deseas que sepan; que comprendan, que sientan, que renazcan si así lo quieres; que vomiten todo, que suelten, que les duela, que se asqueen, que se asusten, porque así lo aceptaremos siempre. También Viejita Sabia, sé que no todos te merecen, que no están listos, que no te comprenden e incluso te malin

Miedo a la Ayahuasca

Hay dos tipos de miedo en aquellas personas que intentan imbuirse en los caminos de la Madresita Ayahuasca. Uno es el miedo previo de quienes no han probado la plantita, el que combustiona por el prejuicio y la ignorancia. Otro es el miedo de quienes, ya en la brega ayahuasquera, han visto y escuchado sin respaldo ni anestesia la desnuda verdad de sí mismos y de sus actos. Entonces uno es el miedo en pañales y el otro es el miedo orgánico, el cardinal. El uno presenta una escala en desuso por su insignificancia y el otro aún no encuentra el término adecuado para nominarlo como tal. Así pues, en los caminos de la Ayahuasca, si empiezas con miedo terminarás con miedo elevado al cuadrado, casi lidiando con el pánico. Entonces emerge una solución obvia:  hay que superar el miedo sin el desdén del sabelotodo y con la técnica del eterno aprendiz. Pero no estoy de acuerdo por ser una solución improcedente, ya que, como todo lo que vino con la Gran Creación, el miedo es parte de nosotros y sol

Enemigos

En tiempos de guerra y oscuridad, dos desconocidos, sin verse uno al otro, tropiezan entre sí. Uno de ellos pregunta con voz firme y amenazante “¿Quién anda allí?” ... Al no encontrar respuesta rastrilla su arma y grita “¡Quién está allí?” ... El otro, mientras enciende su linterna para marcar un punto de luz en la oscuridad, responde   “Soy yo, y no tengo arma alguna para enfrentar esta batalla, porque solo el que tiene miedo siente la necesidad de defenderse. Hoy no tengo miedo y siento la necesidad de traslucir tus sentimientos o ser parte de ellos” .

Pobreza y reciprocidad

La pobreza material es una ilusión que nos hace creer que los desposeídos necesitan de los ricos para sobrevivir. Cuando esto pasa, nace el negocio del donante y del mendigo. El primero trata de lavar su conciencia mientras que el otro se convierte en un pedigüeño emprendedor. En este negocio la publicidad y el espectáculo no son ajenos. Como testigo, afirmo que enhorabuena descendieron a esta tierra las enseñanzas del cosmos superior. Allá no son los ricos que regalan a los pobres ni los pobres se arrodillan ante los ricos, sino que los dones se intercambian solo para que la energía siga fluyendo entre los seres vivos, y nada más. Allá, y como algunas veces he visto pasar acá, las cosas se dan sin esperar que regresen (caridad), sin fijarse en el aspecto del otro (irreflexivo), sin escoger lo que tenemos que dar (desprendimiento), sin cálculo de inversión (desinterés), sin decir luego que se ha dado (anonimato), y sin traducir la cantidad y la calidad de lo donado (sin eufemismos). Y

Pulso de la situación socio-económica de la Región Cusco

En los últimos años la región del Cusco se ha convertido en un importante eje de desarrollo económico para el sur del Perú. Varias sinergias confluyen para dar forma a la nueva oleada de modernización por la que atravesamos, entre ellas, la carretera transoceánica, el incremento de la actividad turística y la incidencia de las industrias extractivas. Así también, acorde a este proceso, están en cartera proyectos que darán un nuevo empuje a la economía regional, como la construcción del gaseoducto del sur-andino y del aeropuerto internacional de Chinchero. Con todo ello, uno puede notar a primera vista que la región se encamina hacia la consolidación de su desarrollo socioeconómico, sin embargo, al escarbar en las cifras, notamos que el desmedido pulso atribuido al ámbito macroeconómico, languidece para mostrar la indiferencia del Estado, la inequidad y la exclusión en que vive la mayor parte del torrente social. Bajo este contraste, el presente artículo tiene como objetivo mostrar el e